El sistema se basa en la utilización de telecámaras termográficas infrarrojas, programadas y gestionadas por el software que detecta las variaciones de calor.
Este tipo de tecnología, que permite su uso en condiciones de oscuridad, permite el control de perímetros sin dar ninguna ventaja a malintencionados que de esta forma no poseerán ninguna referencia sobre el lugar que quieran superar.
El sistema actúa incluso cuando hay humo causado por botes fumígenos, incendios, condiciones atmosféricas extremas y a grandes distancias, garantizando al personal de seguridad el control del perímetro, de túneles, depósitos y áreas de elevada seguridad.